“Fueron
requisados todo lo que quedaba de los amorreos, de los hititas, de los
pereseos, de los jeveos y de los jebuseos, en una palabra, todos los que no
eran israelitas. A todos sus hijos que quedaban en el territorio, y que no
habían sido exterminados por los israelitas, Salomón los sometió a trabajos
forzados y lo están aún hoy. Pero no requisó a los israelitas; estos servían como soldados, integraban la guardia, eran oficiales, escuderos, jefes de carros o soldados de caballería." 1 Re 9, 20-22
Trabajos
forzados. ¿De qué otra manera se construyen templos, palacios, ciudades, grandes
naciones, empresas internacionales? Con trabajo, por supuesto, mucho del cual
excede las fuerzas de quienes lo realizan y se recurre a la represión para sacar
fuerza donde ya no hay. Y eso lo hacemos casi todos, no sólo quienes están en
posiciones de poder. Necesitamos ingresos y cada día más los ingresos no son
suficientes. Todo sube, menos el salario.
Así
que en el afán de crearnos un patrimonio, de dar alimento, educación, sustento,
techo, asistencia, vestido, incluso entretenimiento a nuestras familias, nos
vemos forzados a trabajar mañana, tarde y noche. Fuera de casa y dentro de
ella.
¿Para
quién trabajamos? ¿Qué reinos estamos construyendo? ¿A quienes estamos entregando
todo ese esfuerzo? Si somos demasiado estrictos con la respuesta, nos daremos
cuenta de que trabajamos para dar riqueza a muchos otros que no somos nosotros.
Por
eso es sumamente importante que le demos un sentido mayor a nuestro esfuerzo, y
que siempre reservemos fuerza para lo que realmente importa. Ya nos dio el
ejemplo Abraham: a los hijos no se les sacrifica. A ellos no.
Si
vamos a construir, construyamos familia, amistad, compañerismo, apoyo,
comunidad. De otra manera la vida deja de tener sentido muy pronto. Y si
sientes que sólo eres una piedra que se usa o se descarta. Busca quien alimente
tu valía. Porque una piedra sin fuerza no puede sostener muros, y si lo hace,
tarde o temprano el muro se viene abajo. ¿Queremos familias fuertes, amistades
reales, compañeros amables, vecindarios solidarios, comunidades comprensivas, industrias,
empresas y naciones sólidas? Hagamos el sacrificio correcto, y tengamos claro
que ese nunca puede ser la persona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario