Un río de sueños

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“El pueblo ofrecía entonces sacrificios en los lugares altos porque aún no había sido construida la Casa destinada al Nombre de Yavé. Por este mismo motivo Salomón ofrecía sacrificios en los Lugares Altos y quemaba allí perfumes, a pesar de que amaba a Yavé y seguía los preceptos de David, su padre.” 1 Re 3, 2-3

Ni siquiera recuerdo haber escuchado el despertador a la hora acostumbrada -que es demasiado temprano, insiste mi esposo. De modo que no logré empezar mi oración con un poco de más calma. En lugar de eso, puse una canción que es para mí una plegaria triste, pero alegre (sí, se puede ser ambas cosas y al mismo tiempo): River of Dreams (El rio de sueños), la cual les comparto abajo. Ya lista para bajar a desayunar, leí el inicio del tercer capítulo de 1 Reyes. 

A veces las cosas son así. No tenemos lo que necesitamos para dar lo mejor de nosotros. Vivimos con prisa y entre vacíos que duran segundos, pero logran que se nos vaya el tiempo entre las manos en un abrir y cerrar de ojos. Con todo, hay que hacer el sacrificio, hay que hacer el esfuerzo. Salomón ofrecía sacrificios en los lugares altos. Billy Joel, compositor de la canción que te comparto, intenta cruzar un río demasiado amplio, y a ratos quiere darse por vencido. Yo, igual que ambos, subo montañas agotadoras y camino en la noche para colocarme a la orilla de un río enorme que quiero cruzar y poder así recuperar aquello que me quitaron. Pero a ratos quiero darme por vencida y dejar de intentarlo. Porque igual que Dios, no puedo obligar a nadie a abrir las puertas de su ser. Y en este mundo hay demasiadas puertas cerradas. Hago lo que puedo, aunque a veces creo que no puedo más. 

¿Cuál es tu sacrificio, tu esfuerzo, tu dedicación, tu pena hoy? Compártela conmigo, con otros, y dejemos de cargar pesares solos. Quizá lo único que necesitemos es quedarnos quietos y dejar de intentar subir montañas y cruzar ríos. Quizá sólo necesitemos vernos a los ojos y decir te amo. 

Que la Paz y el Amor de nuestro Señor Jesucristo nos envuelva en la calma del sacrificio hecho y la oración escuchada. Dios bendiga la vida que tenemos y bendiga los esfuerzos que realizamos. Dios nos ayude a dejar de esforzarnos tanto, dormir y disfrutar más, y nos brinde la gracia de ocuparnos mejor y preocuparnos menos. Ojalá nos atrevamos a caminar sobre el agua, logremos cruzar ese río -ambos, todos-, y nos encontremos a mitad del camino. Shalom. Te amo.

Fragmento de la canción “River of Dreams” de Billy Joel

En medio de la noche camino en mi sueño,

desde las montañas de la fe hasta un río profundo.

Debo estar buscando algo sagrado que perdí,

pero el río es amplio y difícil de cruzar.

Y a pesar de que el río es amplio y difícil de cruzar

camino todas las noches a su orilla y trato de atravesarlo

para, por fin, encontrar lo que estoy buscando.

He estado buscando algo,

que salió de mi alma.

Algo que nunca perdería.

Algo que alguien me robó.

No sé por qué camino en la noche,

pero ya estoy cansado y no quiero caminar más.

Espero que no me tome el resto de la vida,

encontrar aquello que he estado buscando.

 Foto tomada de: https://unsplash.com/photos/vfaYObaMRew